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Conocimientos básicos e introducción

Cultura del Baño en Japón: 1000 Años de Historia y Tradición

Explora la rica historia de la cultura del baño en Japón. Descubre rituales antiguos de onsen, influencias budistas, cultura de sento del período Edo, tradiciones terapéuticas y la filosofía del baño comunal que continúa en el Japón moderno.

¿Por qué los japoneses aman tanto bañarse? ¿Por qué se bañan todos los días? ¿Por qué los onsen son una presencia especial?

Para responder a estas preguntas, es necesario conocer la historia de la cultura del baño que se ha desarrollado durante más de 1000 años. Esta cultura forma la parte central de la identidad japonesa.

Antigüedad: El comienzo de la cultura del baño

Descubrimiento de los onsen naturales

Japón es un país volcánico. En todo el país, los onsen brotan naturalmente. Se cree que los antiguos se dieron cuenta de los efectos curativos al observar a los animales entrar en los onsen.

En los libros de historia más antiguos de Japón, 'Nihon Shoki' (720) y 'Kojiki' (712), ya hay menciones sobre los onsen. Se dice que Dogo Onsen tiene una historia de 3,000 años y que Arima Onsen ha existido desde la era de los dioses.

El budismo y el desarrollo de la cultura del baño

Durante el período Nara (710-794), cuando el budismo se introdujo formalmente en Japón, la cultura del baño se desarrolló significativamente. Se construyeron 'yokudo' (salas de baño) en los templos, y los monjes comenzaron a bañarse como parte de su entrenamiento. Según las enseñanzas budistas, 'la limpieza es acercarse a Buda'.

En el Templo Todai-ji, se ofrecían baños no solo a los monjes, sino también a los enfermos y a los pobres, en una práctica llamada 'seyoku'. Esto se considera el comienzo de los baños públicos en Japón.

Durante el período Heian (794-1185), el baño se convirtió en una cultura refinada entre la nobleza. Las residencias de los nobles tenían 'yudono' (salas de baño). Sin embargo, no se sumergían en una bañera como en la actualidad, sino que era un estilo similar a un baño de vapor.

Período Edo: La era dorada de la cultura del sento

El período Edo (1603-1868) fue la era en la que la cultura del baño en Japón se desarrolló de manera más espléndida.

La proliferación explosiva de los sento

En Edo (actual Tokio), había alrededor de 600 sento en su apogeo. En una gran ciudad con una población de un millón de personas, eran instalaciones indispensables para la vida de la gente común.

Los sento no eran solo instalaciones de baño, sino también centros comunitarios. Eran lugares de intercambio de información, socialización y negocios. Al desnudarse, samuráis, comerciantes y artesanos se volvían iguales, independientemente de su estatus social. Este es el comienzo del concepto de 'relaciones desnudas'.

También en esta época nació la profesión de 'sento eshi', artistas que pintaban murales de montañas como el Monte Fuji en las paredes de los sento.

El establecimiento de la cultura de toji

Durante el período Edo, el 'toji' se extendió entre la gente común. Consistía en pasar varias semanas o meses en un área de onsen para curar enfermedades o lesiones. También era un entretenimiento durante la temporada baja agrícola.

Se crearon 'rankings de onsen', similares a las clasificaciones de sumo, para clasificar los onsen. Esto es un precursor de los rankings modernos de onsen. Personas como yo, que visitan instalaciones de sauna y las clasifican, han existido desde el período Edo.

Período Meiji: Modernización y cambios en la cultura del baño

Con la Restauración Meiji, Japón se modernizó rápidamente. La cultura del baño también experimentó cambios.

El baño mixto, que era común hasta el período Edo, fue prohibido por considerarse vergonzoso para un 'país civilizado' (1868). Además, el baño comenzó a ser valorado no solo como un placer personal, sino también desde el punto de vista de la salud pública.

La medicina de los balnearios de Alemania fue introducida, y los efectos de los onsen comenzaron a ser investigados científicamente en esta época.

Durante el período Taisho (1912-1926), la arquitectura de los sento se refinó artísticamente, y se establecieron las pinturas de paisajes en las paredes de los sento.

Período Showa: Crecimiento económico y proliferación de baños domésticos

En la última parte del período Showa (1945-1989), con el rápido crecimiento económico de Japón, la cultura del baño también cambió significativamente.

Desde la década de 1960, los baños comenzaron a instalarse en los hogares. En 1965, la tasa de penetración era de aproximadamente el 20%, y para 1985 era de aproximadamente el 90%. Con la proliferación de los baños domésticos, el número de sento comenzó a disminuir. En 1965 había alrededor de 20,000 sento en todo el país, pero para el año 2000 se redujeron a aproximadamente 5,000.

Sin embargo, a finales de la década de 1980, surgió un nuevo estilo de 'super sento'. Estas instalaciones eran más grandes, se asemejaban a un parque de atracciones, contaban con una variedad de bañeras y permitían estancias prolongadas. Además, con el crecimiento económico, la gente comenzó a disfrutar de su tiempo libre, y los viajes a onsen se convirtieron en una moda.

Período Heisei y Reiwa: El auge de la sauna y la reevaluación de la cultura del baño

Durante el período Heisei (1989-2019), aumentaron las instalaciones de onsen de un día y se desarrollaron las instalaciones de spa y resort. Y desde finales de la década de 2010, la sauna se volvió extremadamente popular entre las generaciones más jóvenes.

La influencia del manga 'Sado', la compartición de experiencias de 'totonou', y la sofisticación de las instalaciones de sauna. Como amante de la sauna, esta tendencia es muy gratificante.

En el período Reiwa (2019-presente), el baño no solo se reconoce como una actividad de limpieza, sino también como una actividad de 'bienestar' para mejorar la salud mental y física. El 'turismo de onsen', donde los turistas extranjeros experimentan los onsen, también se ha vuelto popular.

Características únicas de la cultura del baño en Japón

El hábito de bañarse todos los días

Aproximadamente el 90% de los japoneses se bañan todos los días. Esto es un porcentaje muy alto a nivel mundial. La cultura de la limpieza, la relajación, el ritual como cierre del día. El baño está profundamente arraigado en la vida de los japoneses.

Cultura de las relaciones desnudas

Al desnudarse, se eliminan el estatus social y los títulos, y las personas se vuelven iguales. Incluso en el mundo de los negocios, las 'relaciones desnudas' son valoradas. Los viajes a onsen se consideran una oportunidad para profundizar las relaciones de confianza.

Baños de temporada

En Japón, hay una cultura especial de baño para cada estación. Baños de iris en primavera (5 de mayo), baños de menta en verano, baños de crisantemo en otoño (9 de septiembre), baños de yuzu en invierno (22 de diciembre, solsticio de invierno). La cultura de disfrutar del cambio de estaciones mientras se baña es única de Japón.

Continuación de la cultura de toji

Incluso hoy en día, la cultura de 'toji', que consiste en estancias prolongadas para tratamientos en onsen, continúa. Yo mismo he pasado largas estancias en áreas de onsen con el propósito de toji varias veces, y ha sido una experiencia maravillosa que me ha permitido reiniciar tanto el cuerpo como la mente.

Diferencias con la cultura del baño en el extranjero

En Occidente, la cultura de la ducha es práctica y rápida. En cambio, Japón tiene una cultura de bañera, donde se disfruta de un baño prolongado. Se comparten baños públicos y también se busca la curación del alma.

Aunque hay similitudes con los hammam (baños de vapor) en el mundo islámico y la cultura de la sauna en el norte de Europa, la cultura del baño en Japón ha desarrollado estos elementos de manera única y los ha sublimado en la forma de 'onsen'.

Impacto de la cultura del baño en la sociedad japonesa

La cultura del baño es una de las razones por las que Japón es uno de los países más limpios del mundo. Además, las 'relaciones desnudas' han sido la base de la conciencia de igualdad en la sociedad japonesa, y los sento han funcionado como centros comunitarios locales.

Los onsen son un recurso turístico importante en Japón y apoyan la economía local. Además, el baño regular contribuye al mantenimiento de la salud de los japoneses.

Desafíos y futuro en la actualidad

Con la proliferación de los baños domésticos, los sento tradicionales continúan disminuyendo. La alta edad de los propietarios de sento y ryokan de onsen y la falta de sucesores también son problemas graves. También hay desafíos en la atención a los turistas extranjeros, como el problema de los tatuajes y las barreras lingüísticas.

Sin embargo, se está extendiendo el movimiento para proteger los sento históricos y las instalaciones de onsen como patrimonio cultural. Al igual que con el auge de la sauna, las nuevas generaciones están encontrando nuevos valores en la cultura del baño. También se están llevando a cabo esfuerzos para promover la cultura del onsen a los turistas extranjeros.

Conclusión: Una rica cultura nacida de 1000 años de historia

La cultura del baño en Japón se ha cultivado durante más de 1000 años. La fe en los onsen de la antigüedad, la influencia del budismo, la cultura del sento del período Edo, la tradición del toji. Todos estos elementos se han entrelazado para formar la rica cultura del baño moderna.

Esta cultura va más allá del simple acto de lavar el cuerpo, está profundamente arraigada en la vida de los japoneses como una forma de curación del alma, un lazo social, un respeto por la naturaleza y un placer de la vida.

Cuando visites Japón, te invitamos a experimentar esta cultura del baño con su larga historia y tradición. Será una experiencia especial que te permitirá tocar el corazón de Japón.