Cuando visitas un balneario en Japón, siempre encuentras algo especial: el huevo termal.
La clara semilíquida y la yema cremosa son el atractivo de este huevo único. Y es el calor de las aguas termales lo que lo hace posible.
El huevo termal es la fusión definitiva de la cultura de las aguas termales y la gastronomía japonesa.
¿Qué es un huevo termal?
Un huevo termal es un huevo cocido con el calor de las aguas termales.
Es completamente diferente de un huevo duro convencional. Un huevo duro se cocina en agua hirviendo (100°C), resultando en una clara y yema sólidas. En cambio, el huevo termal se cocina en aguas termales a 60-70°C, resultando en una clara semilíquida y una yema cremosa. Esta textura inversa es la característica del huevo termal.
¿Por qué sucede esto? Hay una razón científica detrás.
La clara del huevo comienza a solidificarse a unos 60°C y se solidifica completamente a 70°C. Por otro lado, la yema comienza a solidificarse a unos 65°C y se solidifica completamente a 75°C.
El huevo termal se cocina a una temperatura de 65-70°C durante un período prolongado. A esta temperatura, la clara se solidifica lentamente pero no completamente, mientras que la yema comienza a solidificarse pero permanece cremosa. Esta gestión precisa de la temperatura es lo que crea la textura única del huevo termal.
Historia del huevo termal
Se dice que el huevo termal ha existido desde la era Edo.
Los residentes de los balnearios utilizaban el calor de las aguas termales para cocinar huevos. Este fue el origen del huevo termal. En ese tiempo, el combustible era valioso, y el calor de las aguas termales, que permitía cocinar sin usar leña o carbón, era muy apreciado.
Después de la era Meiji, cuando los balnearios comenzaron a desarrollarse como destinos turísticos, el huevo termal se estableció como una especialidad local. Los turistas comían huevos termales en los balnearios, y esta costumbre se extendió por todo Japón.
Hoy en día, siempre encontrarás huevos termales en los balnearios. En tiendas de recuerdos, restaurantes y máquinas expendedoras. Se ha convertido en una delicia estándar de los balnearios.
Cómo se hace un huevo termal
Hacer un huevo termal es sencillo.
En los balnearios, hay "lugares para hacer huevos termales". Estas instalaciones permiten a los turistas hacer sus propios huevos termales, convirtiéndose en una de las atracciones de los balnearios.
El método es el siguiente:
- Coloca huevos crudos en una cesta
- Sumerge la cesta en las aguas termales
- Espera unos 15-20 minutos
- Saca la cesta
- Enfría los huevos en agua fría
- ¡Listo!
Esta simplicidad es la razón de la popularidad de hacer huevos termales. Incluso los niños pueden hacerlo. Es una actividad familiar. Además de disfrutar de las aguas termales, puedes disfrutar de la experiencia de hacer huevos termales, lo que aumenta el valor del turismo termal.
La importancia de la temperatura del agua termal
Para hacer huevos termales, es esencial una temperatura adecuada.
La temperatura ideal es de 65-70°C. A esta temperatura, si se calienta durante 15-20 minutos, se obtiene un huevo termal perfecto.
Sin embargo, no todas las aguas termales tienen esta temperatura. La temperatura de las fuentes termales varía según el balneario. Algunas aguas termales tienen 40°C, mientras que otras superan los 90°C.
Si la temperatura es demasiado baja, el huevo no se solidifica. Si es demasiado alta, se convierte en un huevo duro convencional. Por lo tanto, la gestión de la temperatura es crucial en los lugares para hacer huevos termales.
En muchos lugares, las fuentes termales se enfrían a la temperatura adecuada antes de usarlas. O se mezclan varias fuentes para lograr la temperatura ideal. Esta técnica de gestión de la temperatura es lo que produce deliciosos huevos termales.
Cómo comer un huevo termal
El huevo termal es delicioso por sí solo.
Rompe la cáscara y colócalo en un recipiente. Añade salsa de soja. Revuelve con palillos. La clara y la yema se mezclan, creando una textura suave. Llévalo a la boca de un solo bocado. Delicioso. Simple, pero exquisito.
En los balnearios, se proponen varias formas de comerlo.
Salsa de soja con dashi: Se ofrece una salsa de soja especial para huevos termales. El umami del kombu y el bonito realza el sabor del huevo termal.
Sal: Simplemente con sal. Disfruta del sabor original del huevo.
Donburi de huevo termal: Coloca el huevo termal sobre arroz y añade salsa de soja. Una combinación simple pero perfecta.
Topping para udon o soba: En los restaurantes de udon o soba de los balnearios, a menudo puedes añadir un huevo termal como topping. Al mezclarlo con los fideos, se vuelve más suave.
Ensalada: Añade el huevo termal a una ensalada. Al mezclarlo con el aderezo, se convierte en una ensalada cremosa.
Estas diversas formas de comerlo amplían el atractivo del huevo termal.
La individualidad de los huevos termales según el balneario
Los huevos termales varían sutilmente según el balneario.
La temperatura de la fuente, los componentes y el valor del pH influyen en el sabor y color del huevo termal. Incluso con el mismo método de preparación, los huevos termales pueden variar según el balneario.
Huevo termal de Hakone (huevo negro): El huevo termal de Owakudani en Hakone tiene una cáscara negra. Al cocerse en aguas sulfurosas, el azufre se adhiere a la cáscara, volviéndola negra. Aunque el interior es un huevo termal normal, su apariencia es impactante. Existe una leyenda que dice que comer un huevo negro prolonga la vida siete años.
Huevo termal de Beppu: El huevo termal de Beppu tiene un fuerte aroma a azufre. Al ser cocido en aguas sulfurosas, tiene un sabor distintivo. A algunos les encanta este aroma, mientras que a otros no les gusta.
Huevo termal de Kusatsu: El huevo termal de Kusatsu se hace en aguas ácidas, lo que le da una textura ligeramente más firme a la clara.
Estas individualidades crean el atractivo de los huevos termales de cada balneario. Al recorrer los balnearios, comparar los huevos termales de cada lugar es una forma de disfrutar.
Cómo hacer huevos termales en casa
Los huevos termales también se pueden hacer en casa.
Incluso sin aguas termales, con una gestión adecuada de la temperatura, puedes hacer huevos similares. Los siguientes métodos son comunes.
Método 1: Cocción a baja temperatura
- Llena una olla con agua y llévala a ebullición
- Apaga el fuego y añade agua fría para alcanzar 65-70°C
- Coloca los huevos
- Cubre y deja reposar durante 15-20 minutos
- Saca y enfría en agua fría
Método 2: Olla arrocera
- Coloca los huevos en la olla arrocera
- Vierte agua a unos 70°C (suficiente para cubrir los huevos)
- Usa el modo de mantenimiento de calor durante 30 minutos
- Saca y enfría en agua fría
Método 3: Cocedor a baja temperatura
- Configura el cocedor a baja temperatura a 68°C
- Coloca los huevos
- Calienta durante 45 minutos
- Saca y enfría en agua fría
Con estos métodos, puedes hacer huevos similares a los termales. Sin embargo, aún así, hay una ligera diferencia con los huevos hechos en aguas termales. Probablemente, los componentes de las aguas termales influyen en el sabor.
Valor nutricional del huevo termal
El huevo termal es altamente nutritivo.
El huevo es considerado un alimento completo. Contiene proteínas, grasas, vitaminas y minerales en un equilibrio perfecto.
La característica del huevo termal es que es fácil de digerir. En su estado semilíquido, las enzimas digestivas funcionan mejor. Los huevos termales se digieren más rápido y se absorben mejor que los huevos duros.
Comer un huevo termal en el desayuno en un balneario tiene sentido. Es fácil de digerir y altamente nutritivo. Es el alimento perfecto para el cuerpo en la mañana.
Máquinas expendedoras de huevos termales
En algunos balnearios, hay máquinas expendedoras de huevos termales.
Puedes comprarlos las 24 horas del día. Y están recién hechos. Esta conveniencia es popular entre los turistas.
Por la noche, después de un baño en las aguas termales, compras un huevo termal en la máquina expendedora y lo comes en el lugar. Esta experiencia se convierte en un recuerdo del viaje termal.
Los huevos termales en las máquinas expendedoras suelen ser más baratos. Cuestan entre 50 y 100 yenes cada uno. Es fácil comprarlos, lo que es otro atractivo.
Huevos termales como recuerdo
Los huevos termales son populares como recuerdo.
Se venden en tiendas de recuerdos en paquetes al vacío. Tienen una larga vida útil y son fáciles de llevar a casa. Puedes disfrutar el sabor del balneario en casa.
Recientemente, han aumentado los productos procesados que usan huevos termales. Curry de huevo termal, ramen de huevo termal. Incluso hay alimentos instantáneos que recrean el sabor del huevo termal.
El valor de la experiencia de hacer huevos termales
Hacer huevos termales no es solo cocinar. Tiene un valor experiencial.
Usar el calor de las aguas termales para cocinar huevos. Este método primitivo de cocción es interesante. En la vida urbana moderna, es normal cocinar con fuego o gas. Pero en los balnearios, se utiliza el calor geotérmico. Esta experiencia fuera de lo común es lo que crea el valor de la experiencia.
Para los niños, es una experiencia educativa. Pueden experimentar el hecho científico de que "los huevos se cocinan con el calor de las aguas termales". Es divertido como un experimento de ciencias.
Hacer huevos termales en familia. Esta actividad conjunta fortalece los lazos familiares. Como recuerdo de un viaje termal, hacer huevos termales es ideal.
Normas para hacer huevos termales
En los lugares para hacer huevos termales, hay normas.
No acaparar las cestas: El número de cestas es limitado. Una vez que termines de usarlas, pásalas inmediatamente a la siguiente persona.
Respeta el tiempo: El tiempo recomendado es de 15-20 minutos. Configura un temporizador y saca los huevos cuando el tiempo haya pasado. Si los dejas, otros no podrán usarlos.
No ensuciar la fuente: Si un huevo se rompe, no lo dejes. Sácalo inmediatamente y limpia.
Cuidado con las quemaduras: Las aguas termales son calientes. Ten cuidado de no tocar el vapor al sacar la cesta. Los niños deben estar siempre acompañados por un adulto.
Al seguir estas normas, todos pueden disfrutar de hacer huevos termales de manera agradable.
El huevo termal como símbolo de la cultura termal
El huevo termal simboliza la cultura termal de Japón.
Utilizar el calor de las aguas termales. Aprovechar la energía natural. Esta sabiduría se ha transmitido desde la era Edo.
La experiencia de hacer huevos termales. El placer de comerlos. Estas experiencias se fusionan para realzar el atractivo del turismo termal.
El huevo termal no es solo un alimento. Es un producto cultural que fusiona la cultura termal y la gastronomía japonesa.
Come huevos termales en los balnearios
Cuando visites un balneario, debes comer huevos termales.
Si es posible, experimenta haciéndolos tú mismo. Coloca los huevos en una cesta y sumérgelos en las aguas termales. Espera 15 minutos. Este tiempo de espera también es divertido.
Saca los huevos y enfríalos en agua fría. Rompe la cáscara. La clara suave y la yema cremosa. Cómetelos con salsa de soja.
En ese momento, estás experimentando la fusión de la cultura termal y la gastronomía. Es una experiencia especial que solo puedes disfrutar en los balnearios.
Sumérgete en las aguas termales. Y come huevos termales. Ahí reside el atractivo concentrado de los balnearios japoneses.
